La inteligencia artificial (IA) hace posible que las máquina aprendan de la experiencia, se ajusten a nuevas aportaciones y realicen tareas como hacen los humanos.
La mayoría de los ejemplos de inteligencia artificial de los que usted escucha hoy día – desde computadoras que juegan ajedrez hasta automóviles que se conducen por sí solos – se sustentan mayormente en aprendizaje a fondo (deep learning) y procesamiento del lenguaje natural.
Mediante el uso de estas tecnologías, las computadoras pueden ser entrenadas para realizar tareas específicas procesando grandes cantidades de datos y reconociendo patrones en los datos.
Historia de la inteligencia artificial
El término inteligencia artificial fue adoptado en 1956, pero se ha vuelto más popular hoy día gracias al incremento en los volúmenes de datos, algoritmos avanzados, y mejoras en el poder de cómputo y el almacenaje.
La investigación inicial de la inteligencia artificial en la década de 1950 exploraba temas como la solución de problemas y métodos simbólicos. En la década de 1960, el Departamento de Defensa de los Estados Unidos mostró interés en este tipo de trabajo y comenzó a entrenar computadoras para que imitaran el razonamiento humano básico.
Por ejemplo, la Defense Advanced Research Projects Agency (DARPA, Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa) realizó proyectos de planimetría de calles en la década de 1970. Y DARPA produjo asistentes personales inteligentes en 2003, mucho tiempo antes que Siri, Alexa o Cortana fueran nombres comunes.
Este trabajo inicial abrió el camino para la automatización y el razonamiento formal que vemos hoy en las computadoras, incluyendo sistemas de soporte a decisiones y sistemas de búsqueda inteligentes que pueden ser diseñados para complementar y aumentar las capacidades humanas.
Aunque las películas de Hollywood y las novelas de ciencia ficción representan la inteligencia artificial como robots semejantes a humanos que se apoderan del mundo, la evolución actual de las tecnologías IA no es tan aterradora – o así de inteligente. En su lugar, la inteligencia artificial ha evolucionado para brindar muchos beneficios específicos a todas las industrias. Siga leyendo para conocer ejemplos modernos de inteligencia artificial en las áreas de atención a la salud, comercio detallista y más.
SAS ha proporcionando soluciones de inteligencia artificial por años, incluso cuando extendimos los límites en disciplinas como el aprendizaje basado en máquina y el aprendizaje a fondo. Hoy día, ya ayudamos a nuestros clientes a capitalizar las oportunidades de crecimiento que presenta la inteligencia artificial.
Mirando al futuro, continuaremos incorporando soluciones AI en todo el portafolio de productos de SAS para llevar los beneficios de transformación de la toma de decisiones asistida por máquina a todos los terrenos.
Por: SAS