La crisis de la pandemia ha obligado a muchas empresas a tener que reinventarse muy rápidamente para poder adaptarse a esta nueva normalidad. Para algunos sectores, el desafío ha sido mucho mayor que para otros. Sobre todo en el caso de servicios que se prestaban de forma presencial: restauración, gimnasios, construcción, peluquerías, etc., la lista es interminable. En cambio, para aquellas empresas que estaban preparadas para prestar su servicio o vender su producto online, esta nueva normalidad ha supuesto una oportunidad para salir más fortalecidos de esta crisis.
En ambos casos, la automatización del marketing supone una herramienta excelente para ayudarnos a superar los desafíos que nos plantea esta nueva normalidad y también aprovechar todas las oportunidades que supone.
El Marketing Automation para la información y experiencia de usuario
Una de las primeras consecuencias de la crisis del COVID-19 ha sido la gran incertidumbre que ha provocado. Por supuesto, la cual genera inseguridad a la hora de tomar cualquier decisión y por lo tanto el impacto sobre nuestra capacidad de conseguir nuevas ventas o incluso mantener nuestra base de clientes existente es seguro.
- ¿Seguís ofreciendo tu producto o servicio?
- ¿Ha habido algún cambio en el servicio o producto que tengo contratado?
- ¿Cómo y cuándo lo voy a recibir?
Muy probablemente a lo largo del confinamiento hemos tenido que dar respuesta a todas estas inquietudes.
La cura para la incertidumbre es la información, y es justamente información lo que debemos proporcionar a nuestros clientes y posibles clientes para combatirla.
En este sentido, el Marketing Automation es un gran aliado para acompañar a nuestros clientes y posibles clientes en todo su journey de forma ágil y efectiva.
A través de acciones automatizadas, podemos asegurarnos de que los usuarios reciben la información que necesitan en cada momento para reducir al máximo su incertidumbre y maximizar tanto la retención como el cierre de nuevos clientes.
Las posibilidades son muchas y no tienen porqué limitarse al email: pop-ups informativos, chatbots, contenido dinámico en nuestra página web.
Optimización de recursos
Otro de los retos que nos ha planteado el COVID-19 ha sido la necesidad de utilizar nuestro tiempo y presupuesto de forma eficiente para hacer frente a la pérdida de negocio.
Muchas empresas se han visto obligadas a conservar únicamente aquellas actividades esenciales para mantener su actividad y capear el temporal.
Por este motivo, es imprescindible utilizar de forma inteligente los recursos disponibles y dedicarlos a los posibles clientes con un mayor potencial de convertirse con certeza en futuros clientes.
En lugar de basarnos en la intuición, la automatización del marketing nos ofrece técnicas como el lead scoring para poder identificar rápidamente los leads de nuestra base de datos con mayor cualificación.
De esta forma, podemos asegurarnos de no dejar escapar ninguna oportunidad y al mismo tiempo no malbaratar recursos en leads que nunca van a convertirse en clientes.
Fidelización y retención
Seguro que no es la primera vez que escuchas que es mucho más caro captar un nuevo cliente que mantener uno existente. Es por ello que también nos puede interesar aplicar técnicas de Marketing Automation sobre nuestra base de clientes existentes.
En primer lugar, implementando técnicas de lead scoring conseguiremos detectar aquellos clientes más propensos a posibles upselling o cross-sellings y así podremos llevar a cabo acciones de marketing o ventas que nos ayuden a generar más negocio.
Por otro lado, la automatización del marketing también nos puede ayudar a fidelizar y retener nuestros clientes actuales.
A través del envío de encuestas de satisfacción y feedback podemos captar información muy valiosa para mejorar nuestro servicio o producto y adaptarlo a la situación actual.
Además, estas acciones también nos permitirán identificar a clientes insatisfechos para emprender acciones que nos ayuden a minimizar el churn.
Afortunadamente, parece que empezamos a ver la luz al final del túnel y poco a poco los sectores más afectados por el confinamiento van a ir recuperando su actividad.
Aún es muy pronto para saber cuáles de los cambios que ha provocado el COVID-19 están aquí para quedarse. De todos modos, una lección que deberíamos llevarnos de esta crisis es que vivimos en un mundo que experimenta grandes cambios de forma cada vez más frecuente y acelerada.
Por ello, nuestras estrategias de marketing y ventas deben estar preparadas para adaptarse de forma muy ágil a escenarios que hasta ahora eran inimaginables.
Por IEBSchool