Al pasearse estas últimas semanas por cualquier ciudad de España, habrá podido observar no solo que sus bares, restaurantes y comercios están con persiana baja por más de dos meses, sin embargo, muchos de esos lugares están colgando carteles en sus locales anunciando que se sumaban a plataformas de Delivery que hasta antes de la pandemia por el covid-19 se les escapaban: Deliveroo, Glovo, Tyvo, Uber Eats.
Esta es una estrategia que se está utilizando en todo el mundo, desde España hasta El Salvador, ya que esta es una situación única en los últimos 100 años
Es por esa misma razón que muchos restaurantes tanto españoles como salvadoreños han optado estas semanas por ofrecer sus productos a través de las plataformas de delivery, como una forma de dar salida a sus menús y así poder facturar en lo que va de la semana.
Así, y según los datos que manejan las propias plataformas, la mayoría han sumado casi 1.000 restaurantes nuevos desde que se declaró el estado de emergencia a mediados de marzo. Deliveroo, con 7.500 establecimientos en su plataforma, ha añadido 700 más estos días; Tyvo, con cerca de 600 comercios ya afiliados; Uber Eats, con cerca de 6.000 en su porfolio, ha sumado otros 900; Glovo, con 4.650 restaurantes en la aplicación, ha incluido 950 más.
Aunque es muy probable que la alianza de los comercios con estas plataformas sea temporal por lo que está sucediendo y que una vez terminada la pandemia no los vuelvan a utilizar o bien puede que estemos frente a un nuevo modus operandi del negocio de comida y otros productos, lo si sabemos es que en el rubro de la comida dan por sentado que, debido a las limitaciones que todavía van a vivir, sumadas a la velocidad en la que se recupere o no el consumo, son la situación perfecta para que los establecimientos que han aterrizado ahora en plataformas de delivery sigan formando parte de ellas en los próximos meses.
Por eso, muchos de ellos han adaptado sus menús estas semanas -para poder incluir productos que «viajen bien»- y han tenido que elegir los envases en los que enviar sus productos.
Podríamos decir que este segmento ha ido en crecimiento en lo que va de la crisis; en este sentido, también es un alivio no solo para los comercios o restaurantes que envíen por ahí sus productos sino también para todos aquellos clientes que por la misma situación no pueden salir y necesitan o desean esos productos.
La apertura gradual de establecimientos, la implantación de protocolos higiénicos en los mismos y la vuelta progresiva a los lugares de trabajo marcarán la recuperación del sector, que pasa del -95% en abril a -40% en diciembre (respecto a 2019). Los bares y fast food tendrán una recuperación más rápida que los restaurantes tradicionales, apuntan, pero el único segmento con crecimiento será la comida a domicilio o para llevar.